¿Sabías que comenzamos haciendo piezas de juguetes?
En Picó Galvañ llevamos décadas dedicándonos a la fabricación de envases de plástico por extrusión-soplado, pero no fue un camino fácil: ha estado lleno de evolución, adaptación y mucho trabajo. En el vídeo que acompaña este artículo, te contamos como empezó todo: tras asentarnos en las naves actuales en Castalla (año 2003), nos planteamos el objetivo de producir piezas para el sector juguetero. Pero con el tiempo y los inevitables cambios del mercado, dimos un paso adelante y comenzamos a buscar otros sectores, introduciéndonos con fuerza en otros sectores como el alimentario, el menaje y las piezas técnicas.
Ese proceso de transformación nos permitió diversificarnos, aprender y crecer sin perder de vista lo esencial: la calidad, la seguridad y el compromiso con nuestros clientes. Hoy fabricamos tanto nuestros propios productos para el sector alimentario como piezas auxiliares para otras empresas, siempre bajo los mismos estándares exigentes. Poco a poco hemos conseguido formar un gran equipo humano altamente cualificado, formado y con experiencia, que pone atención en cada detalle y trabaja con la idea clara de que solo hay una forma de hacer las cosas: con profesionalidad. No se trata solo de producir, sino de hacerlo bien, de forma responsable y adaptándonos a cada producto y a lo que cada cliente necesita.
¿Qué es lo que mueve a Picó Galvañ para seguir mejorando?
Nos mueve la innovación, sí, pero también la responsabilidad de ofrecer un producto seguro, duradero y adaptado a las necesidades reales de quienes lo van a utilizar. Desde botellas y garrafas de pequeño y gran formato hasta soluciones técnicas específicas, todo lo que fabricamos parte del mismo compromiso. Trabajamos con polietileno de alta y baja densidad, y fabricamos envases en diferentes formatos, desde 125 ml hasta 40 litros. Estamos presentes, como hemos comentado, en sectores como la alimentación, pero también en el sector limpieza, jardinería o la industria técnica, y lo hacemos siempre con un objetivo claro: ofrecer soluciones prácticas, duraderas y seguras. Cada diseño, cada molde y cada detalle está pensado para facilitar el trabajo de quien los usa.
Desde Castalla, en Alicante, seguimos creciendo y evolucionando siempre manteniendo nuestros valores: calidad, innovación y servicio. Esos tres pilares son más que palabras para nosotros, son la forma en la que entendemos nuestro trabajo diario.
Así es como nació el actual Picó Galvañ, y así es como, día a día, fabricamos confianza. ¿Hablamos?
